El chef preparó un menú vegano espectacular, superando mis expectativas. La habitación era increíblemente silenciosa, lo que me permitió descansar como nunca antes.

La habitación tenía una vista hermosa del

río Ródano. El personal fue muy atento y la decoración era moderna y elegante. Sin embargo, la presión del agua en la ducha no era la mejor, lo que podría mejorar la experiencia general.

Recomendado para quienes buscan lujo y una experiencia inolvidable

La atención del personal fue excepcional, siempre dispuestos a ayudar y asegurarse de que tuviéramos todo lo que necesitábamos. Además, disfrutamos de una habitación con una vista impresionante y un diseño elegante, ¡un espacio que realmente hizo nuestra celebración de aniversario aún más especial!

No fue barato, pero valió la pena cada centavo.

Detalles históricos impresionantes
Atención personalizada excepcional
Bar Le Dôme espectacular

Servicio lento en el bar
Presión de ducha inconsistente
Problemas de aseo

me encantó el hotel intercontinental, ubicado muy cerca del centro, lo que facilita explorar la ciudad. el spa Cinq Mondes es un verdadero paraíso para relajarse, con un ambiente perfecto para desconectar. además, la transformación del lugar es impresionante, manteniendo el esplendor del edificio histórico.

lo recomiendo, pero la presión del agua en la ducha podría mejorar.

recomendaría el lugar sin duda alguna para una estancia breve

Habitación elegante, desayuno delicioso, con opciones como huevos poché que no puedes dejar de probar, todo a un paso del transporte público que te lleva a cualquier parte de la ciudad.

Todo fue increíble

Experiencias culinarias en Le Dôme.

No te olvides de reservar una cena en el restaurante Epona, su menú es verdaderamente excepcional y destaca por realzar los sabores locales.

la ubicación del intercontinental es genial, cerca de tiendas y restaurantes. el servicio de habitaciones fue rápido y eficiente. también, la limpieza fue impecable todos los días. me ayudaron a reservar en un restaurante que fue una gran elección.

la atención en el bar necesita mejorar. 🍹

Aunque el lugar es increíble, el costo del aparcamiento a 35 euros me pareció excesivo, algo que puede hacer mermar el entusiasmo de algunos. El restaurante Epona, aunque sirve buena comida, a veces está demasiado lleno, y puede ser complicado conseguir mesa. Por otro lado, la variedad de fruta en el desayuno fue un poco limitada, lo que podría mejorar.

Buena ubicación y encanto arquitectónico

Estuvimos en un hotel que es una maravilla arquitectónicamente. Además, el personal fue amable, pero el aparcamiento es bastante caro. Disfrutamos de un desayuno rico, aunque le faltaba más fruta. El bar era un lugar bonito para tomar algo rápido, pero el serve fue un poco lento. Me gustaría haber visto más personal disponible.

una vista mágica del río desde nuestra habitación

atención al detalle, personal amable

suelo no limpio

El hotel es una maravilla arquitectónica, la transformación del antiguo hospital es impresionante. Disfrutamos de una cena en el restaurante Epona, donde el chef Mathieu Charrois ofrece platos que realzan los sabores del territorio. El desayuno tenía huevos poché con trufa negra que estaban deliciosos y me hacían querer repetir cada mañana. Además, la zona de spa es perfecta para relajarse y disfrutamos de un masaje en Deep Nature.

Los precios del estacionamiento son bastante altos.

La habitación era súper cómoda y espaciosa, con un diseño elegante que me encantó. Las camas y almohadas eran muy suaves, lo que me permitió descansar bien. Además, tenía vistas impresionantes del río Ródano, lo que hacía que cada mañana fuera especial. Sin embargo, noté que la presión del agua en la ducha podría haber sido mejor.